ARTEMISIA DOMUS, LA CASA DE INVITADOS DE LUJO EN EL CORAZÓN DE NAPOLES

Nápoles es, por definición, la ciudad de la hospitalidad, donde cada lugar es el hogar, donde el ritual del café no es solo probar, sino compartir, intimidad y escuchar. Naples es un poco como esas mujeres maternas con senos grandes, como esas tías que extienden sus manos para envolverla en un abrazo cálido y profundo, aquellas que te dejan con un recuerdo lleno de olores y sensaciones cautivadoras. Sea lo que sea, Nápoles permanece en el corazón de todos, porque es un proxeneta, sí, porque te importa, es cierto, con aspecto de bribón callejero, merodeador y pecador, pero siempre es de corazón, magnánimo y generoso. Y Nápoles son sus napolitanos, que lo inundan con cuentos y canciones de cuna, con friselle y favulelle, que las personas que abren las puertas de la casa también son desconocidas para usted, que orgullosamente le muestra el fruto de su humilde trabajo, que pone a la familia sobre todo, que siente la fuerza de la raíz, del lugar del que proviene y al que siempre regresará.

De la misma pasta, un hogar único en su tipo, compuesto por un personal totalmente napolitano, Artemisia Domus. Una estructura ubicada en un edificio histórico que data de fines del siglo XVIII, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, ubicado entre la Piazza del Gesù y Spaccanapoli, el centro neurálgico desde el cual puede llegar a pie a todos los destinos locales.

Artemisia Domus, digna de todo palacio noble, trae consigo todos los secretos de la historia: se dice que alguna vez fue utilizada como casa de placer. Y para presenciarlo están los grandes espejos redondos y convexos que se encuentran en la entrada de la puerta principal, antes de la renovación; con él, los pequeños lavabos dentro de cada habitación y algunas sábanas arrugadas con tarifa, desafortunadamente perdidas y reemplazadas por una recuperación minuciosa de la preciosidad del lugar, como la gran puerta blanca que ahora se usa como mostrador de recepción, las lámparas geométricas de cobre oxidado en el Paredes, baldosas de cerámica en los pisos que ahora se utilizan como base para la barra del bar y para las mesas en el salón.

Artemisia Domus es, sin duda, un palacio lleno de encanto, que recibe a los huéspedes en nueve suites diferentes donde puede elegir un spa privado en la habitación, en cuanto a la "Nicea" grande y luminosa cuyas ventanas dan al Castel Sant'Elmo y la espléndida Certosa de San Martino. Los techos altos están rematados con vigas de madera a la vista, el piso es de parquet, recordado por los colores cálidos de los muebles y la luz de las grandes lámparas de pie. La cama king size también incluye una cama doble con un adorno de memoria, un sofá cama y un jacuzzi para cuatro con cromoterapia, en el que todos los tonos rojos varían según su gusto. La suite está totalmente insonorizada y equipada con todas las comodidades: TV inteligente, caja fuerte, minibar y kit de baño de cortesía.

El nombre de la estructura rinde homenaje a la pintora Artemisia Gentileschi, quien en 1630 vivió un paréntesis de su vida en Nápoles, constituida en ese período por un eminente fervor cultural e intelectual. En la entrada, una copia de "Autorretrato como alegoría de la pintura", fechada en 1638/39, recuerda su valor artístico e histórico, tomado poéticamente del nombre dado a cada habitación, mujeres a las que Gentileschi representaba con su impronta creativa, orgullosa y feminista.

Artemisia Domus es la casa de huéspedes de lujo en el corazón de Nápoles, donde puede experimentar esta ciudad de belleza ilimitada, con comodidad y bienestar, porque además del spa y sauna privada, puede reservar un masaje profesional personalizado en su habitación. El personal siempre estará listo para recomendar lugares y destinos de acuerdo a sus gustos y necesidades, ofrece viajes en barco para descubrir las islas más bellas, excursiones en lancha privada a la costa de Amalfi, alquiler de bicicletas y tours culturales en el centro de la ciudad, donde puede tener un detente a probar el delicioso "O pere o 'o musso", una especie de callos hervidos servidos fríos con sal y limón, un plato popular que te hará la boca agua; o probar, para los más lujosos, los clásicos hojaldres rellenos de crema pastelera; el lugar en el infierno está reservado para los amantes de la "pizza en la billetera", que se come estrictamente en la calle y se dobla en papel pergamino en cuatro, mientras que eliges una mini cuna para podar en casa, un pequeño milagro de la artesanía napolitana. ¡Y agradecemos a Dios que creó Nápoles, que se ríe y muere en Nápoles!

Artemisia Domus se encuentra en Via dei Carrozzieri 13, Nápoles